Proyecto TQC. Te Quiero, Cuídate! Cuando un amigo/a tiene cáncer.
Aquí puedes dejar tus comentarios o experiencias y contribuir a que otros encuentren inspiración. ¿Qué te gusta que te digan cuando te llaman tus amigos?, ¿qué te gusta que te digan cuando te visitan?, ¿qué le dijiste tu a algún amigo que visitaste que tenía un cáncer?. Comparte anécdotas. Los que se quedan sin palabras, los que no paran de hablar de si mismos, los que hablan de todo por no hablar de lo que te pasa. Nadie lo hace con mala intención. Pero si acumulamos aquí unas cuantas anécdotas quizás ayudaremos a algunos enfermos a entender mejor que le pasa a sus amigos. También ayudaremos a que algunos amigos entiendan mejor que les pasa a los enfermos en esa relación que a veces el cáncer modifica, generando algunos distanciamientos absurdos por la inseguridad, el desconocimiento, no saber que decir y la falta de experiencia.
Buenos regalos para los enfermos, regalos inadecuados,… esta permitido el sentido del humor, la ironía, y la desdramatización para que riéndonos un poco de nosotros mismos nos ayudemos entre todos.
Pues sí que es cierto. Cada uno se metía en sus propios problemas, y se llenaban de escusas. Se limitaban a preguntar a mi madre por mí. Por otro lado,, mi madre en muchas ocasiones no supo de cómo me encontraba. No es lo mismo hablar por teléfono a que te vean. ¿Cómo estás ?? y yo decir bien… por no preocuparla o por no darle detalles de lo mal que estaba. Cuando los efectos de la quimio, se me iban pasando y me encontraba mejor, pues a la calle con mi hijo y con mi madre y a prepararme a la siguiente quimio (cada vez más temida). También agradecer a ciertas conocidas o compañeras, que se volvieron más amigas. Días antes de la quimio, me recogía en su coche y nos tomábamos algo para charlar y ver el mar. Era una manera de coger aire y sentirme tranquila para la siguiente sesión del tratamiento. En general, la gente es muy solidaria, y agradezco a madres del Cole de mi hijo de las que también he podido tirar de ellas, me han ofrecido ayuda con mi pequeño y me han animado muchísimo.
Quiero aclararles que al principio, cuando me operaron, sí tuve visitas tanto en el hospital como algunas en mi casa, eso sí justitas (de mi familia). Mi suegra ha sido una pieza clave y muy importante en nuestras vidas a la que la quiero mucho (cuidaba de nuestro hijo cuando ingresaba en el hospital o tenía quimio, consulta…) Mis amistades casi todos los días venían a verme, digamos que esa etapa fue más entretenida y me sentía querida. El baile empezó cuando me quedé calva y una quimio tras otra de 21 días y cada vez más intoxicada y de peor aspecto, AHÍ en ese momento, es cuando más necesitaba «una visita inesperada acompañada de un buen abrazo». «Que se hubiesen llevado a mi niño para entretenerlo y sacarlo de casa» (era pleno verano). Mi marido, me cuidaba, trabajaba todos los días y a todas horas y yo me pasaba los días sin poderme levantar de la cama. Eso, se lo pedí, pero sólo hubo una respuesta y que al final no pudo ser. Es cuando me veo sola, solita afrontando esos duros momentos. Me dí cuenta que contaba con mi marido, y mi hijo.
Es duro contaros todo esto, pero así lo viví. Amo a mis hermanos y cuñados, pero creo que no estuvieron muy acertados. «Una llamada de teléfono de vez en cuando»….
No sé, algo como «que hubiese entrado alguien por las puertas de mi casa y estar allí un rato, aunque hubiese sido para charlar o jugar con mi niño, así como que hubiese puesto la tele…No me hubiese importado si yo no estaba para visitas, pero saber que no estaba sola con mi hijo, que alguien se preocupaba de mí y de mi niño. En fin, deciros para acabar, que estoy bien con todos ellos, que me tuve que aguantar sus reacciones ante tanta adversidad. Eso sí, después de haber charlado por parte y compartido un montón de lágrimas.
Gracias por compartir tus sentimientos. Seguro que algunos pensaron no le visito para no molestar, o quizás pensaron: uff no sabré que decirle, en realidad en estas situaciones, se ven las debilidades de las personas. También hay otros muy superficiales que quieren vivir su vida ideal y no quieren personas tristes o ver momentos duros en su vida. En realidad es un reflejo de su inseguridad. Pues piensan que ellos no sabrían como afrontarlo y rechazan tener que enfrentar esa realidad. Como ves afloran las debilidades de los demás.
Enhorabuena ¡¡¡ Es un vídeo estupendo. No sólo los amigos, también la familia. Me pasó con un hermano en especial, al pobre le tocó cortarme el pelo junto con mi hijo de 7 años con sus tijeras como si fuera un juego (verano 2016) y luego, rompió a llorar cogido de mi mano cuando mi marido me afeitaba la cabeza. Yo le decía que no me iban a querer ver, que no me visitarían. Sus palabras » esto es muy fuerte para nosotros, compréndelo»; (refiriéndose a mi madre y resto de hermanos/as). En ese momento yo alucinaba…. la enferma era yo..perder mi pelo, con una herida profunda que no cicatrizaba por culpa de la quimio….fue algo muy muy duro y encima era yo la que tenía que comprender.
Verme tan feeeeaaaa e hinchada del veneno del tratamiento y pronosticaba la cosa que pocas visitas de familia…….Lo han sentido mucho, me decía mi madre, sí pero desde sus casas, le respondí.
Soy Montse y quiero compartir un mensaje de una de esas Guerreras que han acabado su cáncer y ahora miran atrás y dan ánimos a otras personas explicando su batalla personal:
👉 Lloré cuando supe que tenía cáncer.
👉 Lloré de miedo antes de la operación.
👉 Lloré por mi teta, que se quedó hecha cachitos en un quirófano.
👉 Lloré cuando el brazo dolía y no lo podía mover.
👉 Lloré de impresión en mi primera sesión quimioterapia cuando llegué a la analítica y vi tanta gente enferma.
👉 Lloré de dolor por las llagas de la boca, que no me dejaban comer.
👉 Lloré de rabia y enfado por no disfrutar de la Navidad.
👉 Lloré cuando tuve que rendirme al agotamiento y tuve que dejar de hacer parte de mi vida porque no tenía fuerzas.
👉 Lloré de rabia e impotencia cada vez que tuve que despedir a una compañera.
👉 Lloré todas las veces que quise ver la salida a esto y no encontré ninguna luz al final del túnel.
👉 Lloré cuando el espejo me devolvía el reflejo de una extraña.
👉 Lloré de dolor por cada vena que se partió en mi brazo durante las sesiones de quimioterapia.
👉 Lloré cuando me vi torpe y se caían las cosas de mis manos por la neuropatía.
👉 Lloré por mi piel churruscadita por la radioterapia, por no soportar la ropa.
👉 Lloré muchas noches cuando quería dormir y soñar y no podía.
👉 Lloré cada vez que tuve miedo de que esto no terminara nunca.
👉 Lloré cada vez que imaginé a los míos sin mi…
👉 Lloré cada vez que me sentí sola entre tanta gente…
Todo esto, y seguramente mucho más que yo por «suerte» no he tenido que vivir, es lo que supone un cáncer de mama y su tratamiento. Me parecen muchas cosas para esconderlas detrás de un simple lazo rosa…
Gracias a mis médicos, a mi gente y a mi misma (por este orden), 9 meses después puedo decir las soñadas palabras 📢📢📢 ¡¡JÓDETE CÁNCER!!
A partir de ahora voy a vivir sin tí. Sé que puedes volver, pero ya no te tengo miedo. Porque llevo mucho aprendido estos meses
Ostras, lloré por todo éso. Me he sentido dentificada con todas las frases.
Un beso a todas, y seguimos adelante
Hola Merce , soy Montse de Hydroskin Oncology .
Gracias, son las palabras de una de mis amigas- paciente.
SEGUIMOS!!!
Muy cercanas estas palabras, ayudan a comprender mejor y a valorar el apoyo cuando mas se necesita. Seamos generosos al expresar lo que sentimos.
Gracias Verónica por tu sensibilidad y apoyo. Cuídate